
Los retenes forestales estamos de luto. Otra campaña más, somos testigos de cómo compañeros de distintas comunidades, pierden la vida en las labores de extinción de los incendios forestales que se han declarado en este verano fatídico.
Este año ya son 11 los trabajadores que pasan a engrosar la ya de por si, larga lista de muertos que se producen todos los años en los periodos de extinción y prevención de incendios forestales en España. Hoy la tristeza nos acompaña, pero no es el único sentimiento que nos invade. Los retenes forestales convivimos a diario con la rabia. Rabia, porque a pesar de las vidas que se están perdiendo, a pesar de las hectáreas de montes calcinadas, y a pesar de los pueblos que se han visto arrasados por las llamas, seguimos formando parte de un dispositivo contra incendios “ineficiente”.
En Castilla la Mancha, llevamos años denunciando la situación de desamparo que estamos sufriendo l@s trabajador@s de los retenes forestales de esta región.
No nos cansamos de manifestar nuestra disconformidad, con la falta de medidas y de voluntad por parte de la administración para cambiar esta situación. Pero a pesar de nuestras demandas, seguimos teniendo: bases sin luz ni agua corriente, torres de vigilancia obsoletas con pistas de acceso “inaccesibles”, retenes a los que se les reduce el número de componentes hasta el punto de ser totalmente “ineficaces”, y salarios y condiciones laborales propias de otra época, totalmente desacordes con la peligrosidad y especialización que requiere el trabajo de la extinción de incendios forestales, además de padecer multitud de deficiencias, que no sólo influyen en la efectividad del dispositivo, si no que también afectan directamente a nuestra dignidad como trabajadores.
Desde el pasado mes de diciembre, se está intentando negociar el nuevo convenio colectivo del sector forestal en Castilla la Mancha, con la intención de cambiar la situación actual. Pero hasta el momento, todos los intentos de llegar a un acuerdo por parte de los sindicatos con Geacam, han sido infructuosos. Geacam ha puesto al frente de las negociaciones a personas sin capacidad de decisión propia, y con una actitud hermética ante cualquier propuesta de mejora en las condiciones laborales del sector. De este modo pretenden retrasar cualquier acuerdo firme hasta que pase la campaña de extinción. No debemos olvidar que la “imagen pública” que tanto preocupa a Geacam, es sobre todo de cara al periodo de extinción. Por otro lado, hemos tenido que aguantar las declaraciones de José Luís García Guijarro (consejero de agricultura y desarrollo rural), que calificaba de “inasumibles y fuera de lugar” nuestras demandas.
Estamos cobrando en torno a los 900 euros, por una disponibilidad de 24h y enfrentándonos a situaciones de alto riesgo en nuestro “trabajo diario”. Ésto si que es “inasumible”.
Ante esta actitud de “bloqueo y manipulación de la información”, nos hemos visto en la obligación de salir a la calle para informar de nuestra situación, y hacer participes a la opinión pública y a los medios de comunicación, de cuales son nuestras demandas.
Exigimos la revisión del PLAN INFOCAM, para que no se vea reducido de forma encubierta el número de efectivos del dispositivo contra incendios, y para que desaparezca la figura de los miniretenes.
Exigimos una mejora salarial acorde con las circunstancias específicas del sector, y teniendo en cuenta el alto índice de siniestrabilidad que padecemos, así como una serie de mejoras sociales en lo relativo a disponibilidad y periodos vacacionales, que desarrollamos en las propuestas que se están llevando a la mesa de negociación. Nos sentimos discriminados con respecto a los trabajadores forestales de otras comunidades, que desarrollando las mismas funciones que nosotros, disfrutan de unas condiciones económicas y laborales que están a años luz de las nuestras.
Exigimos que se realicen las obras necesarias para el acondicionamiento de bases, torres, pistas de acceso (los torretistas tienen que subir con sus propios vehiculos), y demás infraestructuras para que se cumplan con los mínimos de seguridad e higiene imprescindibles para un puesto de trabajo.
Exigimos una mejor formación, que consideramos insuficiente, tanto para el reciclaje del personal ya contratado, como para el personal de nueva incorporación, con la anticipación y calidad suficiente para que el primer día de trabajo, todo el mundo este cualificado para el desarrollo de sus funciones.
Exigimos que se respeten los acuerdos que se han firmado con anterioridad. La empresa Geacam, incumple de manera sistemática el anterior convenio, imponiendo modificaciones en las condiciones laborales que afectan a los derechos y libertades de los trabajadores.
Exigimos el final del bloqueo que están teniendo las negociaciones del convenio, con la excusa de que en tiempo de “crisis”, nuestras demandas son “inasumibles y fuera de lugar”, ya que consideramos que en tiempo de “crisis”, nuestra vida no vale menos, y teniendo en cuenta que partimos de una situación totalmente insostenible.
Ha llegado el momento de que en Castilla la Mancha se escuche la voz de los que se están dejando la vida por defender los intereses de tod@s. Los retenes forestales levantamos nuestra voz por un convenio digno. Ni una vida más, ni un árbol más.
Martes 18 y miércoles 19 de Agosto nos vemos en las Manifestaciones: punto de encuentro, Plaza del Infantado (11h) salida hacia sede de Geacam-Guadalajara (12h) finalizando el la Delegación de Medio Ambiente,donde se leerá un comunicado.
TE ESPERAMOS!!!!